Es importante que sepas que la oxidación es causada por la exposición al aire, el agua o incluso la luz solar, y estos factores pueden variar dependiendo del material de la herramienta. Por ello, antes de comenzar con el proceso de limpieza, es necesario identificar el material de la herramienta para así tomar las medidas adecuadas.
Una vez que hayas identificado el material con el que estás trabajando, es momento de comenzar a recuperar la herramienta oxidada. Lo primero que debes hacer es eliminar los restos de óxido con la ayuda de un cepillo de cerdas suaves, un paño limpio y un producto específico para la limpieza de herramientas. Sin embargo, debes tener mucho cuidado al usar los productos químicos, ya que pueden dañar los acabados de la herramienta.
Una vez que hayas eliminado el óxido con cuidado, es momento de darle un toque de protección para evitar futuras oxidaciones. Para ello, existen diversos productos que son específicamente diseñados para proteger la superficie de la herramienta, como lacas, barnices, aceites, etc. El tipo de producto que elijas dependerá del material de la herramienta.
Por último, pero no menos importante, es necesario mantener la limpieza de tu herramienta. Para ello, lo ideal es limpiarla después de cada uso con un paño seco y un producto suave para la limpieza de herramientas, así como aplicar el producto protector cada cierto tiempo. De esta forma estarás garantizando que tu herramienta se mantenga siempre en buen estado.
Ahora que ya conoces el secreto para recuperar herramientas oxidadas, ¡ya no tendrás que preocuparte por la oxidación! Sigue estos sencillos pasos y disfruta de la satisfacción de ver tu herramienta como nueva.
En esta pagina tambien respondemos a otras preguntas tipicas como por ejemplo: ¿Cómo se llama la tijera de entresacar? y ¿Qué pasa si dejas las tijeras abiertas?